EL SUJETO Y LO SUBJETIVO: IDENTIDAD Y CULTURA 

Descripción

Se trata del primer eje temático de la maestría, donde las y los aprendientes tanto individual como grupalmente reflexionan sobre su propia subjetividad en relación con el entorno (cultural y vital), y  en donde comience a plantearse, con el propósito de expresar su  pensamiento, la pregunta «¿desde dónde escribo, desde dónde pienso y veo mi mundo (el mundo que voy construyendo día a día)?».

 Todo proceso humano, por su misma índole, es siempre imprevisible porque como asegura Calvo Muñoz: “los procesos educativos son paradojales, holísticos, sinérgicos, contradictorios, ambiguos e inciertos”1. 1. Crisis de la Educación o Crisis de la Escuela. Carlos Calvo Muñoz en el Corazón del Arco Iris. Colectivo. CEAAL. Santiago de Chile 1993.

Si bien podemos afirmar que algunos de sus resultados pueden preverse y consecuentemente planificarse, la mayor parte de ellos no tienen explicación racional debido a su carácter fortuito y ocasional, pero sobre todo porque en su desarrollo entran en juego componentes emocionales y afectivos que dan lugar a relaciones nuevas muchas de ellas inéditas, sorpresivas y motivantes. Conviene insistir en que el proceso que ahora nos preocupa es el resultado de la interacción y cooperación de un determinado número de sujetos que actúan subjetivamente en el marco de las exigencias de su propia realidad.

Esa relacionalidad subjetiva es el componente gracias al cual se logra dar sentido al proceso como veremos a continuación. Este tipo de relaciones subjetivo-participativas conforman, en consecuencia, esa trama existencial de intensa significación para los participantes del proceso, en donde cada uno se significa a sí misma al encontrar y dar sentido a su trabajo grupal.

Las interrelaciones subjetivas, por ser imprevisibles, espontáneas y generadas en el devenir del proceso, crean la tensión sinérgica que es como la fuerza que activa y actualiza la dinámica del proceso.

En un segundo término son esas mismas relaciones intersubjetivas, que para el Dr. Lozanov, son las micro-comunicaciones inconscientes las que producen entre los integrantes del grupo, una serie de vibraciones – impredecibles y multidireccionales – que activan las potencialidades inexplotadas que subyacen como reservas en el cerebro humano. Es lo que él llama sugestología o más concretamente la sugestopedia2.Citado por Francisco Gutiérrez en Pedagogía de la Comunicación en la Educación Popular. Edit. Popular 1993. España pág. 64.

Un tercer énfasis a tener en cuenta es la dimensión afectiva, emocional y sensible de las relaciones intersubjetivas. Esta dimensión intuitiva y emotiva posibilita y acelera la integración e involucramiento de los participantes a través del interés, compromiso, y actitudes positivas que hacen posible esos saltos cualitativos del proceso sinérgico. Para Maturana, lo afectivo no es ni más ni menos que el “el amor, en cualquiera de sus formas, que une a sus miembros. El amor es

la apertura de un espacio de existencia para el otro como ser humano junto a él”(Biología del fenómeno social. Humberto Maturana en la Fuerza del Arco Iris. Op. Cit. Pág. 86).En síntesis, la dinámica pedagógica deberá tener muy presente estos tres énfasis de las relaciones subjetivas: la tensión sinérgica, las micro-comunicaciones inconscientes y el involucramiento afectivo.